Si me buscas estaré en "recuerdos"

Todo blanco, todo es nada... una explosión de luz se ha llevado por delante todo. No hay cadáver, no hay asesino, no hay reflejo, no hay nada...


Yace suspendido en el aire. Yace dormido.

--Duerme, Diego-- Dice Jacob-- no hemos acabado, no se ha acabado, quizás debamos incluso volver a esa habitación oscura...

Jacob, que tiene la misma apariencia que Diego, se le diferencia por el bello facial, un bigote que le da una apariencia más dura y por la forma de hablar, más seca, más segura, más... lógica.

--Duerme, Diego y renace. Y no te preocupes, yo me ocupo--

--¿cuánto tiempo?-- pregunta Diego sin abrir los ojos-- 

Jacob mira el cuerpo suspendido que creía dormido, --puede que un mes, puede una semana, puede que para siempre--

Diego no habla, empieza a perder el conocimiento,empieza cambiarsu mente, su corazón pero mantiene su alma.

--Duerme, Diego-- dice Jacob mientras una lágrima le cae de la mejilla-- Si renacemos, seremos mas fuerte, más sabios...mejor. No lo olvides--

Mientras Diego se funde con la nada, Jacob custodia su alma, custodia el cambio, custodia un renacimiento. Un renacimiento en el que las palabras de una evolucion se mantienen en la nada;

"Más fuerte,..más sabio..mejor. Más fuerte,..más sabio..mejor. Más fuerte,..más sabio..mejor. "

Pd: Como veis, me retiro un tiempo para renacer y realmente esas palabras están en mi cabeza: más fuerte, más sabio , mejor.

La habitación negra, permanecía iluminada por la luz violeta que permanecía suspendida en mitad de la habitación. En el suelo yace un cuerpo inerte. Su asesino tiene el mismo rostro, la misma ropa que él pero hay algo distinto, tiene una mirada distinta, mas seria, más dura.

En la lejanía, el reflejo que una vez habló con el fallecido se acerca con actitud curiosa.

--¿que ha pasado?--

--Es obvio ¿no?--

El reflejo mira las manos del asesino las cuales están manchadas de una sangre ya seca.

--¿por qué?--

El asesino mira al reflejo mientras se levanta del suelo en el que permanecía sentado.

--Era débil--

--no creo que eso sea...--

--si-- corta el asesino-- lo es. hay que ser más fuerte, más seguro, A nadie le gusta una persona en la que no se puede confiar--

--supongo que vas a coger tu el mando--

--por ahora--

--¿Que quieres decir?--

El asesino mira el cuerpo de su victima mientras suspira.

--yo no puedo permanecer aquí mucho tiempo, no soy el indicado, necesitamos renacer.--

--Por suerte para renacer hay que morir--

--si--

--y eso lo acabamos de hacer--

--exacto--

--¿será suficiente?--

El asesino mira al espejo con una sonrisa de resignación-- Para evolucionar al menos sí, seremos mejores--

--Ya veo...--contesta el reflejo--pero la luz seguirá ¿no?--

--como tu le dijiste la última vez--dijo el asesino señalando el cuerpo inerte-- no nos compete a nosotros eliminarla. Sólo podemos esperar y tener esperanza--

--esperanza...--susurra el reflejo-- bonita palabra, esperemos que no sea la última que oigamos...--

Sentado en el suelo, en la soledad de una sala negra, profunda en la que apenas la luz aparece.
"mira en el espejo" fue lo ultimo que recuerda antes de entrar aquí.

Llega aqui buscando como seguir, cómo ser mejor y se encuentra en esta habitación. Camina con duda, intentando palpar algo a lo que agarrarse para orientarse pero no hay nada...

De repente un espejo aparece delante de él, brillante y enorme. en él su rostro se refleja, triste apesadumbrado y deslumbrado por la claridad que en ese sitio parece haber.

-¿qué haces aqui?-- dice una voz

Mirar al rededor no sirve de nada y no consigue encontrar quien produce esa voz tan familiar a la par que lejana.

--contesta--

entonces es cuando se da cuenta. El reflejo habla. No sigue sus movimientos ni siquiera su expresión. Tiene el ceño fruncido.

--eh...--balbucea-- busco... --

--¿el qué?--

-- no lo sé--

De repente una luz morada y brillante aparece allí aparece en el espejo de la mano de su reflejo.

¿buscas eliminar esto?--

De repente el estomago da una voltereta. la cabeza da tumbos y una lagrima solitaria sale de uno de sus ojos. Asiente pero no logra entender qué es.

--vergüenza--dice el reflejo mirando la luz que está en su mano derecha.--culpa--

--quiero que se vaya-- dice derrumbando su cuerpo que cae de rodillas-- que no vuelva.--

El reflejo le mira esta vez frunciendo los labios como de quien busca una solución a un problema enorme.

--me temo que no nos corresponde a nosotros , ni a ti ni a mí quitarla...--
En ese momento la luz se hace un poco más grande haciendo que su cabeza chille por dentro de dolor, Se sujeta la testa intentando sin éxito aplacarlo.

--Es inutil-- dice el reflejo-- espero que al menos hayas aprendido algo--

Asiente mientras más lagrimas aparecen en su rostro.

--Ponte cómodo, si hay algo peor que la vergüenza y la culpa... es perder algo valioso por ello.--

--¿que puedo hacer?--implora

El reflejo que habia iniciado su camino hacia la oscuridad de la profunda habitación, se gira y con gesto de pena susurra-- esperar, aprender y no volver a cometer esto--dice levantando la luz.-- pero sobre todo pedir perdón, aunque puede que no se te otorgue--.

De repente la luz morada destella con tanta intensidad que ilumina la enorme sala. Esta vez aunque el dolor es más intenso, se levanta del suelo, se seca las lágrimas y aguanta el dolor. Un dolor al fin y al cabo merecido, un dolor que retumba por toda la sala, un dolor al que no esta acostumbrado porque nunca lo había sentido tan fuerte, un dolor que le inunda por dentro y que aguanta el silencio mientras su mente envejece a año por minuto, cambiando su mente y su ser a la vez.

Aun me queda un poco de tiempo, antes de acabar mi jornada y entre cabezadas y dolor de espalda me he dado cuenta de algo nuevo:

Quiero cambiar.

No se trata de mis múltiples revelaciones en las que me caigo , me levanto y evoluciono. No. ésta vez es cambiar, madurar.
Si antes quería un trabajo ahora me urge. Y no por temas económicos, que también, sino porque quiero seguir hacia delante, avanzar en mi vida. Quiero ser autosuficiente.

Esto no es de algo que se me haya venido de repente en mi momento nirvana en este trabajo nocturno, no. Es algo que desde haceun mes llevo dándole vueltas y desde hace una semana se ha confirmado en mí.

Esta vez no quiero ser el héroe, el guardián o el santo. No, esta vez quiero ser mayor, quiero ser la persona que cuando vean digan "¿tiene 25? parece más viejo" y no por el aspecto sino por la forma de pensar y actuar. Porque si de algo me he dado cuenta es que la situación en la me encuentro, es de otro nivel. De éstas situaciones en las que tener un sueño, una ilusión, eso ya no vale. Ahora toca ponerse el traje de persona. Olvidar ser un niño, aceptarlo y ser mayor. Evito la frase "ser un hombre" porque considero que "ser un hombre" no tiene porque ser necesariamente mayor y responsable. He visto hombres a los que no confiaría ni un lápiz y es precisamente lo que quiero ser, un tipo en el que confiar.

¿Por qué este repentino ataque de madurez?
Fácil. La mentalidad de soñador no me ha llevado muy lejos y mi otra parte de romántico guardián menos. Éstos perfiles me han hecho cometer más errores que aciertos y últimamente uno lo bastante gordo como para replantearme mi forma de ver mi vida.

No os asustéis, el traje de soñador siempre lo tendré en el armario. Ese traje me viene de familia junto con el romántico guardián. Pero a día de hoy me dedicaré un poco más a luchar por y para mí.

Quizás esto mate el Di de las poesías, de las risas estúpidas y comentarios absurdos y nazca en su lugar el Diego trabajador y serio o quizás no. Lo mismo encuentro el equilibrio entre ambos ¿quién sabe?

lo único que tengo claro es que no quiero más errores ni retrasos. Puede que de un plumazo elimine mi intervalo de aventurero joven. Incluso que me esté enfrentando a situaciones que aun no debiera enfrentar. Pero no me importa. La situación lo requiere, la vida lo requiere. y no quiero volver a fallar. Es el momento de pasar a ser el sabio de la montaña.


venga... a ser persona.